Hoy a las 4 de la mañana, hora en la que todos estamos o planchando la oreja o regresando a nuestros aposentos, dará comienzo el Grand Prix de Quingdao, dos días 24 y 25 y 100.000 dolares en juego, la verdad es que es una pena el desembolso que cuesta organizar un evento de estas características para lo poco que va a lucir y es que la mayoría de judokas y equipos nacionales todavía están descansando del ciclo Olímpico por lo que la asistencia de grandes judokas es practicamente nula.
Ni tan siquiera el equipo japones por cercanía manda a un equipo medianamente fuerte, al igual que los Koreanos y chinos utilizan la oportunidad de testear a sus jóvenes judokas, solo una delegación brasileño-descafeinada, algunos ingleses del primer equipo, Bélgica con sus máximos exponentes a excepción de Charline, poco mongol para los que suelen participar en este GP y un equipo ruso desconocido.
Tan solo el belga Van Tichel esta situado por debajo del numero 10 del ranking mundial en el apartado masculino y en en el femenino solo 8 chicas bajan de este puesto.Veremos a Rafaela SIlva en la categoría de 63 kg y a la campeona olímpica Urska Zolnir que esta en calidad de entrenadora, según cuenta quiere ir tomando el pulso a las competidoras a las que se tendrá que enfrentar mas adelante, todavía no pone fecha a su vuelta al circuito y anuncia que después de la pesadilla que supuso el mantenerse en 63 kg a partir de ahora la veremos en el reino de Lucie Decosse en -70kg.
Lo dicho poco atractivo en este GP de China y esperemos que en Tokyo empecemos a ver un poco de animación por parte de judokas de mas renombre.

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