lunes, 10 de marzo de 2014

Morgane Ribout cuelga el kimono

La que fue sin lugar a dudas la estrella mas brillante del mundial de Rotterdam 2009, la francesa Morgane Ribout cuelga el kimono a la edad de 26 años.
"No quiero engañarme a mi misma, ya no tengo la motivación necesaria para seguir entrenando como es necesario para estar en el alto rendimiento"

Estas fueron las palabras que dieron por finalizada la carrera de esta gran judoka, tras su participación junto con su club, Champigny en el campeonato de Francia por equipos donde finalizaron en el 7º lugar.
La que fuera la sonrisa mas luminosa de todo el Ahoy, tras ganar su titulo de campeona del mundo, la que levanto a todo el mundo de sus asientos con ese increíble movimiento de cadera que hizo volar a una joven japonesa llamada Kaori Matrsumoto, la que acabo por quitarle el titulo en la final a la experimentada portuguesa Telma Monteiro, ese fenómeno precoz en forma de Uchi Mata interminable, la joven del cabello teñido de rubio que iluminaba su rostro, tira la toalla.
Tras su corona de reina del baile de 2009, vinieron las entrevistas, la medios de comunicación, su foto en la pared del INSEP,  la fama, su rostro apareció en casi todos los medios, todo el mundo salio a escena desde su profesor de parbulitos pasando por el primer profesor de judo que le enseño sus técnicas de cadera, hasta llegar al conserje de su edificio.
Después llego la presión, tanto en el plano mental como en el deportivo, era lógico que después de ganar el campeonato del mundo, todo el mundo esperara una carrera llena de éxito y gloria.Los problemas que tuvo para dar el peso en la categoría de 57 kg, las lesiones de hombro que no acababan de darle un respiro, y a esto hay que sumar en la ecuación a una rubia longilinea llamada Autome Pavia, que venia empujando muy fuerte desde, el resultado final es que Pavia acabo quedandose con el liderazgo de la categoría.
Hubo un intento de reconducir su carrera subiéndose a la categoría de 63 kg, pero si en 57 estaba complicado en 63 estaba todo vendido, Clarisse Agbegneou era la líder indiscutible.
Aunque en esta nueva categoría llego a ser plata en el campeonato de Francia de 2013 en Marsella, su estrella no volvió a brillar con la misma intensidad.
El pasado día 8, casi desde el anonimato se despidió una judoka que me levanto de mi asiento en el Ahoy de Rotterdam, que proporciono al judo algunas de las imagenes mas bellas en forma de uchi mata y uno de los rostros con mas simpatía que ha dado el judo femenino.

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